A veces las mujeres expresan no tener deseo de ser también empujadas de aquí para allá en Taiji. Muy frecuentemente no han tenido tampoco ninguna buena experiencia en la práctica de empuje de manos. Pero justamente este entrenamiento ofrece muchas posibilidades para conocerse a sí misma, para ensayar y ampliar el margen de maniobra propio, así como para acercarse de forma divertida y placentera al aspecto combativo de Taichi Chuan. Sería una lástima no querer probar ni siquiera una vez esta rebanada del pastel.

“Para ser una mujer empujas muy bien” escuché recientemente en varias ocasíones durante un seminario de un colega de Taiji. Este tipo de expresión es muy revelador: también en Taichi Chuan es el hombre la medida para todo. Por lo mismo, tiene sentido que las mujeres de manera explícita se dejen enseñar por otras mujeres.

Para dar a ellas la posibilidad de explorar la experiencia de Tuishou, inicié en el 2008 junto con Almut Schmitz el primer encuentro femenino en Alemania de empuje de manos para todos los estilos de Taiji. (5) La idea es facilitar que las mujeres sean instruidas por profesoras, y al mismo tiempo, ofrecer un espacio donde las mujeres escépticas del empuje de manos puedan probar este entrenamiento. Este encuentro facilita también la posibilidad de intercambio entre “empujadoras” con mayor experiencia; además, contiene el deseo de crear redes entre las mujeres que quieran involucrarse en Taichi Chuan y en Tuishou.

Taichi Chuan y defensa personal

En comparación con mi experiencia en Karate y otras artes marciales, así como en defensa personal, me di cuenta relativamente rápido de la utilidad de Taichi Chuan tal como lo aprendo en la WCTAG (Asociación Internacional de Taichi Chuan Chen Xiaowang Alemania) bajo la tutela de Chen Xiaowang y Jan Silberstorff. Dado que a mí siempre me ha interesado la efectividad de las artes marciales con respecto a la defensa personal, me pregunté después de mis primeras experiencias con la meditación de pie en el estilo Chen (Zhanzhuang) ¿qué aporta mantener esta posición combinada con los movimientos lentos de Taichi Chuan en una confrontación corporal seria?

Pronto experimenté los primeros cambios. Pude sentir y llenar más y más mi espacio interno. Me volví más tranquila y serena y lentamente se desarrolló en mí la sensación de mi propio centro. El entrenamiento me ayudó a relajarme y desprenderme mejor del estrés diario. Tener la posibilidad de relajarse bajo circunstancias de presión, como lo es el estrés y, gracias a ello mantener una visión amplia, puede ser de vital importancia en una situación de defensa personal.

Con el fortalecimiento del propio centro, con una percepción realista y serena, por medio de un trato pácifico y saludable consigo misma y con otros, así como en combinación con una creciente firmeza y una mejor estructura corporal, crece también el empeño de valerse por si misma. La condición para ello es la creación de una conciencia propia. La meditación de pie crea justamente este estado de conciencia, ya que ayuda a percibir y conservar el espacio propio.

No obstante, el entrenamiento de Taichi Chuan con respecto a la defensa personal puede tener sus trampas. Reglas fijas en algunos de los sistemas de dichas artes marciales presentan desventajas tanto para las mujeres como para los hombres. Existe el peligro de que durante un enfrentamiento corporal serio uno se apegue automáticamente a las reglas entrenadas. Sobre esto escribe Jan Silberstorff: “Sin atención al objetivo propio (el empuje de manos) [N. del A.] será frecuentemente reducido a un hábil forcejeo que con el tiempo habrá obtenido su propia dinámica y reglamentación. Sin embargo, esto último con frecuencia no es relevante en un combate serio.” (6). Un enfrentamiento corporal real se caracteriza precisamente por ser injusto, malintencionado e incontrolado. Todo está permitido ¡no existen reglas! Es importante que tanto mujeres como hombres tomen esto en cuenta.

A esto se debe añadir que el caso especial de las mujeres en el entrenamiento de Taichi Chuan encuentre consideración. En mi opinión, la defensa personal en Taichi Chuan empieza con los efectos positivos de la meditación de pie. La reafirmación personal, así como una emanación serena, centrada, amigable y una percepción aguda son las mejores condiciones para la defensa personal. Simplemente mediante dicha emanación con frecuencia ningún enfrentamiento corporal se lleva a cabo. Esto no aplica en cada situación ni es garantía de que los ataques no se lleven a cabo. En este punto no se deben pasar por alto los beneficios mentales y de salud, así como el potencial espiritual del Taichi Chuan, ya que éste ayuda a mantenerse saludable y a comprender más profundamente las relaciones en el mundo y entre los individuos. El Taichi Chuan ofrece una gran oportunidad para hacer algo bueno: alcanzar un estado de calma, centrarse mejor y por lo tanto encontrar mayor estabilidad para poder enfrentar mejor las adversidades de la vida diaria. El entrenamiento de Taichi Chuan conduce, sobre todo, a una vida más relajada, pacífica y por consiguiente más feliz y por lo mismo ofrece también las condiciones para un camino integral.

La clase de Taichi Chuan para mujeres

Con la convicción de que Chen Taichi Chuan es una posibilidad efectiva para la defensa personal, ofrezco desde hace varios años cursos de Taichi Chuan para mujeres donde la autodefensa es siempre un tema central dentro de mi concepto de entrenamiento. Para mi la defensa personal significa descubrir con placer el uso de la fortaleza personal, apreciar por sí misma el valor propio y tomarse seriamente. Las explicaciones y aclaraciones son parte del entrenamiento así como lo son la diversión al descubrir y sentir la fortaleza corporal propia. Mis anteriores experiencias con la defensa personal feminista Wendo (7) así como el entrenamiento de Taichi Chuan me han enseñado que lo fundamental para obtener éxito no es tanto la técnica aprendida, sino más bien la actitud y la firmeza propia. En la autodefensa desde dicha comprensión cada decisión vale, incluso no acción puede ser una decisión. Si el Taichi Chuan va a funcionar como defensa personal para mujeres, temas como el miedo, la ira y las limitaciones psicológicas como la incapacidad de golpear o el condicionamiento social deben ser tratados. Las experiencias físicas de defensa personal deben ser integradas en la vida cotidiana de las mujeres donde no existen necesariamente confrontaciones corporales. De esta forma, se debe crear una conciencia de los patrones y el condicionamiento propio, así como de las habilidades y posibilidades individuales.

El condicionamento social, así como los hechos y la información sobre las situaciones en que las mujeres experimentan violencia y transgresión de sus fronteras personales deben tener la misma consideración en el entrenamiento de Taichi Chuan. Una defensa personal efectiva para mujeres debe tener claro estos hechos e incluirlos en su concepto; de otra manera, cada arte marcial o método de autodefensa corre el riesgo de ser ineficaz para ellas. Taichi Chuan ofrece también una posibilidad real de autodefensa para las mujeres siempre y cuando se tomen en cuenta sus circunstancias especiales. El empuje de manos -entrenado con la intención correcta- puede ser una muy buena preparación para enfrentamientos corporales sin gran riesgo de lesión. Este entrenamiento es el puente hacia la defensa personal, pero debe quedar claro que dicha práctica no constituye en sí misma la autodefensa.

tui, shou, push, hand, taijiqua, tai, chi