El empuje de manos ofrece una gran oportunidad para aplicar y ensayar entre dos los principios de Taiji, así como para comprobar qué tanto se logra la transferencia de fundamentos. Para verificar y mejorar la postura corporal, así como para fortalecer el empeño propio se pueden practicar ejercicios en posición fija (Dingbu) o bien con pasos (Houbu). Ahí mismo se puede mostrar como pueden ser utilizados los principios de Taiji en la autodefensa para mujeres. Es así como el estilo Chen de Taichi Chuan ofrece a las mujeres la posibilidad de dedicarse al lado combativo del Taichi Chuan con placer. Puede ayudar también a desarrollar el empeño de valerse por sí misma, así como a tomar la responsabilidad de procurarse y hacer algo en beneficio propio: observar con atención las fronteras personales y hacerlas respetar, tanto por uno mismo como por los demás.

El entrenamiento regular de Taiji proporciona en primer lugar bienestar y salud, ayuda a desarrollar una conciencia propia, refuerza la autoconfianza y por lo tanto ofrece una base para todo lo demás: satisfacción y alegría, crecimiento espiritual con la ayuda de un arte marcial, e incluso la posibilidad de autoafirmación o mejor dicho de defensa personal efectiva.

Para responder a la pregunta inicial: Sí, Chen Taichi Chuan es un arte de defensa personal efectivo, que bajo ciertas condiciones también lo es para las mujeres.


  1. Wolfe Lowenthal; Es gibt keine Geheimnisse; Kolibri, Hamburg, 1993. P.49.
  2. Ibidem.
  3. Jan Silberstorff; Schiebende Hände; Lotus-Press, 2008. P. 258.
  4. Susan Brownmiller; Gegen unseren Willen: Vergewaltigung und Männergesellschaft; Fischer, Frankfurt, 1978.
  5. El encuentro se lleva a cabo anualmente en diferentes locaciones.
  6. Jan Silberstorff, Schiebende Hände, Velbert: Lotus-Press, 2008, p. 24.
  7. Al inicio de los años setentas se originó en Canadá uno de los primeros sistemas feministas de defensa personal llamado Wendo. Este sistema nació de la experiencia de que incluso mujeres que practicaron artes marciales no eran capaces de defenderse en enfrentamientos reales con la ayuda de las técnicas aprendidas. “Wendo” es una palabra nueva creada en analogía a diversas artes marciales que utiliza “Wen” como abreviatura de la palabra inglesa women (mujeres) y “do” que es la palabra japonesa para camino. Juntas significa “el camino de las mujeres” o bien “mujeres en movimiento”.

Biografía:

Sasa Krauter realizó una maestría en deporte y educación. Es terapeuta de deporte (DVGS) y profesora de Taichi Chuan y Qigong (WCTAG, DDQT).

Está involucrada en el entrenamiento de futuros terapeutas de deporte y Taiji en Alemania y Europa. Desde mediados de los años ochentas ha desarrollado un gran interés en las filosofias orientales, las artes marciales y en particular la defensa personal. Además del aspecto marcial se interesa especialmente en los aspectos terapéuticos y mentales de Taichi Chuan. Actualmente practica Zazen.

Chen Taichi Chuan bajo la tutela de Chen Xiaowang -el cual combina salud, desarrollo mental y arte marcial- se ha convertido en su camino. Para ella Taichi Chuan ofrece la posibilidad de educar el cuerpo y la mente. En sus clases su objetivo es transmitir un poco de la riqueza de este arte.

 

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El Taichi Chuan se originó como arte marcial, pero es cuestionable su utilidad como método de defensa personal para mujeres. Sasa Krauter señala los criterios relevantes para la autodefensa de mujeres. En su experiencia, las ventajas de Taichi Chuan se encuentran en el desarrollo de una conciencia corporal y del sentido de autoconfianza, en una mejor estructura física y una postura estable, así como en una presencia centrada y serena, todo lo cual contribuye esencialmente a evadir enfrentamientos físicos. Sin embargo, lo que hace falta es atención a la posición de las mujeres en el contexto social en general y la integración de dicha comprensión en el entrenamiento. Por esta razón, ella ha desarrollado un concepto de entrenamiento que combina Chen Taichi Chuan con el método feminista de defensa personal llamado Wendo.